Hace unos meses se instaló en la calle Manuela Malasaña de Madrid Brodis, un restaurante que quería darle una vuelta de tuerca al tradicional kebab convirtiéndolos en rollitos. Para dar a conocer este local y sus productos, Alba y Luis, fundadores de la marca, han recurrido a su abuela Carmen. Su abuela comenzó su andadura apareciendo en la puerta del Congreso de los Diputados, “un enclave macarra por excelencia”, según la marca, donde se acercó a algunos diputados para presentarles los kebabs de Brodis.

La reacción de los diputados, entre sorprendidos y encantados al recibir un tremendo buen rollo, ha quedado plasmada en las redes sociales de la marca con el mensaje: “En tiempos difíciles, la abuela quiere hacerte sonreír”.

Está previsto replicar la acción en otros lugares donde reinan las “malas vibras”, como la administración de Hacienda o en los próximos partidos de fútbol, ​​donde siempre hay enfrentamientos.

La idea de esta acción diseñada por el equipo de comunicación de Brodis.

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