En un contexto de incertidumbre generalizada en el ámbito económico y social, la confianza de los ciudadanos se erige en estos momentos como un bien muy preciado entre los distintos actores que forman parte del tejido empresarial. En este clima de inestabilidad, Ipsos, a través de su Global Trust Monitor que realiza año tras año, mide en 21 países qué sectores generan más confianza entre la población en general.

Los resultados de esta última edición muestran cómo La industria farmacéutica desbanca al sector tecnológico del primer puesto, aunque sea solo por un punto (34% en promedio), ya tiene el nivel más alto de confianza entre los ciudadanos del mundo. Un porcentaje que, si se compara con el del último estudio de 2021, sube 3 puntos y confirma una tendencia al alza. Por su parte, el sector tecnológico junto con el de alimentación y bebidas ocupan el segundo lugar, alcanzando un porcentaje muy similar al del sector farmacéutico (33%). En el caso del sector tecnológico, se puede observar como desde 2018 ha ido perdiendo la confianza de los ciudadanos con un descenso de 5 puntos desde entonces hasta ahora. En tercer lugar se encuentra la industria del Retail que, en promedio, con un 31%, se encuentra entre las que más confianza despiertan entre el público.

En el extremo opuesto encontramos al Gobierno (45%), las empresas de redes sociales (38%) y las empresas de gas y combustibles (37%) como las que más desconfianza despiertan. Y en el medio encontramos sectores como la banca, los servicios financieros y la energía, donde los niveles de desconfianza y confianza que despiertan son muy similares.

España, desconfianza casi generalizada hacia todos los sectores

¿Y qué pasa con España, qué sectores generan más confianza entre la población, coinciden con los globales? La respuesta es no. La suma de la idiosincrasia española y los altos niveles de corrupción experimentados en la última década, pueden haber pasado factura a la reputación e imagen de algunas industrias y administraciones públicas de nuestro país. Los datos del estudio indican que el sector de venta minorista, con un 42%, es el único que más confianza tiene entre los ciudadanos españoles y sitúa a España como el país europeo que más confianza deposita en esta industria. Por su parte, el sector farmacéutico, así como el tecnológico y el de alimentación y bebidas no encuentran en España la confianza que despiertan en el resto del mundo. De hecho, los niveles de confianza y desconfianza de estos cuatro sectores son muy similares, mostrando así a la población muy dividida.

El resto de industrias incluidas en el estudio obtienen un mayor porcentaje de desconfianza. Destacan las suspicacias que genera el sector del gas y los combustibles, con un 56% de desconfianza y solo un 12% de la población dice confiar en él. LLa banca tampoco está muy valorada, despertando el segundo mayor porcentaje de desconfianza entre las personas, con un 50% y un 16% de confianza. En esta línea, les siguen sectores muy próximos en actividad a los dos anteriores, como los servicios financieros y la energía, con un 47% y un 43% de desconfianza respectivamente. Sin duda, los sectores de gas/combustibles y energía se han visto afectados por la incesante subida de precios en el último año a cambio de una pérdida de confianza por parte de los consumidores.

Cumplir las promesas y ser transparente son los atributos que más confianza generan en los ciudadanos

¿Qué factores determinan tener más o menos confianza en los diferentes sectores? Este aspecto es otro de los puntos abordados en este estudio. A nivel mundial, en promedio, el 36% de la población cree que si un sector cumple sus promesas, merece tener su confianza. Además, la transparencia en lo que hacen también es importante para el 35% de la población mundial. Asimismo, actuar con responsabilidad es algo que se valora, de media, en un 31%, además de ofrecer una buena relación calidad-precio (27%).

A nivel nacional, los resultados son casi similares, pero con ligeros cambios. En este sentido, los ciudadanos españoles consideran más importante la transparencia, con un 37%, seguida del cumplimiento de las promesas con un 32%. Por su parte, actuar de manera responsable y ofrecer una buena relación calidad-precio son considerados positivos por el mismo porcentaje de personas (31 %)

Una peculiaridad de España es que la gente valora mucho la confianza que generan las empresas medioambientalmente sostenibles y las que dan un buen servicio al cliente, con un 27% y un 26% respectivamente. De hecho, sitúan a España como el país europeo que más importancia da a estos dos factores a la hora de confiar en mayor o menor medida en un sector.